Jump to content

Fruto del espíritu: Paciencia 1.0.0

   (1 Valoración)

👇🏻

El capítulo 5 de Gálatas expresa muy bien el contraste entre someterse a la dirección del espíritu y ceder a la influencia de la carne.  Quienes viven bajo la influencia del espíritu se esfuerzan por evitar las obras de la carne, es decir, de nuestra naturaleza pecadora. En cierto sentido, los cristianos “hacen morir las prácticas del cuerpo”. ¿Cómo lo logran? “Por el espíritu.” (Rom. 8:5, 13.) Como no se dejan controlar por los deseos pecaminosos, les resulta más fácil fijar la mente en las cosas del espíritu y seguir su dirección. Seguir “andando por espíritu” implica dejar que la fuerza activa de Dios actúe siempre en nuestra vida. En otras palabras, aceptamos que gobierne nuestras actividades cotidianas.Al operar en nosotros esta fuerza divina, podemos producir “el fruto del espíritu”, o sea, el conjunto de cualidades que agradan a Dios (Gál. 5:22, 23). Claro, sabemos que también tenemos que esforzarnos personalmente. Ilustrémoslo con el ejemplo de un agricultor. Para cultivar la tierra necesita, como es obvio, agua y sol. Sin ellos no va a cosechar nada. En cierto modo, el espíritu santo es comparable al sol, ya que es fundamental para producir el fruto del espíritu. Pero no olvidemos que el agricultor no consigue mucho a menos que trabaje con empeño (Pro. 10:4). De igual manera, si queremos tener una cosecha del fruto del espíritu que sea abundante y de calidad, tenemos que cultivar bien la tierra del corazón.

 Compartir


Valoraciones de usuarios

Unete a la conversación

Tu puedes dar tu opinión de este archivo y registrarte después. Si ya tienes una cuenta, conectate.

Invitado

Richardsm

  

Excelente aporte!!!

Muy completo para poder entender y aplicar este fruto del espíritu y los demás.

nuevamente muchas gracias!

Link to review


×
×
  • Crear Nuevo...